Fuente Diario Puntal
partir del 1 de enero de 2019 y hasta fines de 2023 regirá en todos los lagos de la provincia de Córdoba la prohibición de pesca nocturna, para la preservación de fauna ictícola.
Una resolución publicada en el Boletín Oficial confirma la medida adoptada por la Secretaría de Ambiente y Cambio Climático, que da continuidad a un accionar que viene llevando a cabo la Provincia con el objetivo de evitar la depredación de la población de los espejos de agua cordobeses.
Javier Britch, secretario del área provincial, señaló a Puntal que en los últimos años se viene aplicando esta acción con muy buen resultado. “Lo que está prohibido es la pesca nocturna desde costa o embarcación. En esa hora los animales se acercan a la costa y son presa fácil, y si no se controla se produce una depredación”.
Explicó el funcionario que tras los monitoreos realizados se observó que esta medida ha favorecido la conservación de especies como pejerreyes en los lagos de toda la provincia.
“Esta es una decisión sostenida. Venimos monitoreando los embalses y ríos durante mucho tiempo. Hemos observado que es conveniente sostener esta prohibición para los próximos 5 años para preservar la población de distintas especies de peces”, precisó Britch.
En cuanto a la nueva resolución oficializada hace pocos días, establece: “Veda nocturna de pesca deportiva del pejerrey (Odontesthes bonariensis) y otras especies ícticas en todos los cuerpos de agua lénticos de la provincia de Córdoba, en el período comprendido entre el 1° de enero de 2019 hasta el 31 de diciembre del 2023, en los horarios de 21 a 7 horas del día siguiente (primavera – verano); de 19 a 7.30 horas del día siguiente (otoño – invierno)”.
Y especifica además que se entiende por veda “la inhabilitación de las actividades de pesca en todas sus modalidades, tanto de costa como embarcado”.
Protección
La Provincia viene trabajando desde hace tiempo en la recuperación de la fauna ictícola en todos los lagos, lagunas y ríos. En el sur cordobés, por ejemplo, se han restaurado lagunas que fueron deterioradas por inundaciones y se sembraron alevinos con el fin de volver a restaurar los ambientes naturales.
La tarea está dando sus frutos, y varias lagunas en la zona del Departamento Roque Sáenz Peña y Juárez Celman han vuelto a ser espacios para la recreación y la pesca deportiva controlada.
También, sobre las lagunas vienen trabajando técnicos de la Universidad Nacional de Río Cuarto.
En ese marco, días pasados difundieron un informe sobre la laguna La Margarita, de Jovita, donde se detectó una preocupante disminución de la población de pejerreyes. El trabajo realizado por los profesionales de la UNRC se orientó, entre otros objetivos, al estudio de la población de pejerrey y al posible impacto que produce sobre ésta la presencia de la tararira.
La laguna La Margarita, cuya superficie es de aproximadamente 800 hectáreas, fue en los últimos años uno de los pesqueros más rendidores del sur cordobés. Sin embargo, en este espejo de agua asociado al río Quinto, al igual que en otros ubicados aguas abajo, se observó una merma en la cantidad de pejerreyes medianos pero acompañada de un aumento de las capturas de peces de excelente tamaño y un incremento del número de tarariras.
Con el asesoramiento de profesionales de la UNRC, autoridades de la localidad de Jovita resolvieron imponer una veda a la pesca de pejerrey en un sector de la laguna La Margarita, realizar la siembra de ejemplares juveniles de esa especie y de miles de crías recién nacidas (alevinos) traídas desde Chascomús, para revertir la disminución en la población de peces que viene sufriendo este espejo de agua.